No tengo tabúes en la vida

Lo de follarle la vagina por detrás y a cuatro patas lo corono a veces corriéndome sobre su espalda. Me excito tanto que he conseguido salpicarle con semen el cuello y la cabeza. Lo hago como un reto erótico, como un juego donde siempre gano premios de gusto.

Cuatro en Personalidad o bien Tantra

Seguramente subió la audiencia. Lo comprendo, no a todo el mundo le agrada oír historias de hojas que revolotean en el aire de una cabina de aeroplano y van encendiendo la libido de quien las escucha. La tele prefiere las sirenas a sus cantos.

La Tigresa Blanca: ¿mito o bien realidad?

O simplemente no, quizá sea una prostituta con un ego muy alto o con una educación y respeto más acorde al de una pequeña de 10 años, y a pesar de que has ido a hablarle con tu mejor sonrisa y de una manera muy simpática, te espete algo como largo imbécil.