Pero plantea una discusión interesante: ¿

Otra prueba que realizan las máquinas es la resistencia y durabilidad de los asientos, tanto de la estructura como de la tapicería. Un robot simula la entrada y salida de una persona en 20.000 ocasiones para revisar la resistencia del asiento y 30.000 para medir el respaldo.

Jose on 11 june, 2012 at 16:27 reply

A la relación que Scientwesht ha establecido entre sexo y arquitectura hay quien la ha llamado pornoarquitectura. Otros han preferido escoger el nombre de arquisextura para delimitar, con una palabra, el sorprendente trabajo fotográfico de Giulia o bien, si lo prefieres, de Scientwesht.