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Ataduras alrededor del pecho. La sumisa coloca sus manos a la espalda ofertando sus pechos a fin de que el Amo/a pueda manipular con plena libertad y comodidad. Podemos usar distintos géneros de cuerdas, cintas, correas o bien aun cadenas.

Es valioso reservar instantes especiales para tratar su acto sexual como una práctica espiritual. La meditación, la oración, el ritual y la ceremonia son prácticas comunes que las personas emplean en un camino espiritual. Estos se pueden conjuntar en el acto sexual haciendo lo siguiente.

Al cabo de un tiempo, la vida es triste, opaca y poco placentera. Nos hemos dejado demasiado de nosotros mismos por el camino y dejamos de ser atractivos a nuestra pareja pues cada vez tenemos menos cosas buenas que ofrecer.

Ya por sí, de forma innata en ellos, desarrollaban una serie de habilidades que a mis ojos no se mostraban como semejantes, pues en ese instante no sabía observarlas, y me cegaba la envidia de sus avances y triunfos en frente de mis desastres.

En mi caso personal, te puedo contar que me encantan los escritos, leer, redactar y estudiar. Llegué a tener parejas que me decían que me casase con los escritos, con los estudios y cosas como esas. Al final no resultaba y llegaba el tiempo de cambiar la página.

Cuando tengas el control sobre el equilibrio, levanta la falda de tu puta, o bájale los pantalones y las bragas y frótale el lubricante íntimo en la vagina. Al estar al aire libre, el calor del sol y tus caricias en el coño le provocarán una agradable sensación de placer.,

Y cuando tienes tu interpretación siempre puedes interpretar esa interpretación o unirla con otras interpretaciones para crear una nueva interpretación de nivel superior… pero no entremos en ese nivel de insesateces.

Realizo todo género de servicios y fantasías sexuales, soy una mujer caliente y morbosa, no me agrada frenar la pasión en esos deliciosos instantes de placer, de ahí que, lo que desees hacer lo vamos a hacer … y todas las veces que tú desees …

Hola mi nombre es Thais y soy una exótica jovencita, que compagina su trabajo de modelo con encuentros ocasionales con caballeros como tú.

Caliente y picante: bájate sobre tu amante, pero aléjate de él, lo que le dejará torcer suavemente tus pezones, acariciar tu clítoris o bien masajearte las nalgas mientras que te mueves cara arriba y cara abajo.